Ya tenemos disponible la actualización de la app de Xbox para Windows 10 que permite jugar, a los juegos de Xbox One y los compatibles de Xbox 360, con nuestra Oculus Rift.
Este nuevo modo lleva el streaming del juego a las gafas de realidad virtual donde podremos ver una enorme pantalla inmersa en un entorno virtual. Esto no significa que los juegos sean compatibles con la realidad virtual o que se añadan algún tipo de funcionalidad extra, simplemente podremos usar las gafas como un enorme y caro monitor para jugar a los juegos de Xbox One y sus retrocompatibles de Xbox 360.
Dispondremos de tres modos de visualización “Citadel,” “Retreat” y “Dome.” y para jugar usaremos el mando de Xbox One. Recordemos que Microsoft llegó en el pasado a un acuerdo con Oculus Rift para incorporar un mando de Xbox One con cada unidad de Oculus Rift vendida, por tanto no hay problemas en ese aspecto.
Esta técnica que se va a usar es similar a la opción ya disponible de hacer streaming del juego en una red local entre Xbox One y Windows 10, lo que permite jugar a Xbox One desde el PC.
De momento esta característica es exclusiva para Oculus Rift y no se ha comentado absolutamente nada de una futura compatibilidad con HTC Vive. Justifican esta decisión con que Oculus Rift en la única que tiene una api compatible con Windows 10. Ya veremos cuando caiga en manos de la comunidad.
Si aún no te aclaras muy bien con el concepto que te explicamos en la noticia, no te preocupes por que Microsoft ha preparado un vídeo mostrando y explicando todas sus posibilidades.
En cualquier caso muy buenas noticias para los poseedores de una Oculus Rift que verán aumentadas sus opciones de juego y que por cierto lo harán completamente gratis, porque esta nueva característica llega en forma de actualización de la app de Xbox en Windows 10.